EL MULTINIVEL ESPAÑOL

EL MULTINIVEL ESPAÑOL

Los que acaban de llegar al marketing multinivel están de enhorabuena. Han apostado por un negocio de futuro, que está llamado a cambiar el mundo de la empresa. Han aparcado las viejas creencias en la seguridad de los empleos y empresas, dando entrada en sus vidas a una realidad basada en el valor, el trabajo y el esfuerzo personal, como única garantía de cara al futuro. 

Los que en estos días llegan al Network marketing tienen una gran ventaja. La de ser los primeros en entrar en una industria que está viviendo un momento de evolución y desarrollo que dará como resultado una extraordinaria expansión y reconocimiento.

El Network marketing, o marketing Multinivel se consolida en España. Han pasado dos décadas desde que unos incomprendidos aventureros se iniciaran en esta nueva forma de hacer negocios en nuestro país. Lo que comenzara como una evolución de la venta directa, que viviera sus mejores momentos en el siglo XX, se ha convertido en la alternativa más clara y efectiva a la prolongada recesión que está trayendo consigo el constante cierre de negocios y el consiguiente aumento de número de parados. Ya muchos anuncian el Network marketing como el motor de la economía del siglo XXI. 

Catalogar el Network marketing como una simple opción empresarial es quedarse corto, muy corto. Para muchos el marketing multinivel es la única fórmula conocida que puede reactivar la economía al mismo tiempo que reducir las diferencias laborales y proporcionar un reparto justo y equitativo de la riqueza. Es una oportunidad al alcance de todos, en donde el valor personal y el esfuerzo se recompensan, se valoran, sin ningún tipo de limitación. Las posibilidades de desarrollo y las ganancias son infinitas.

En la década de los 90 el Network marketing iniciaba en los Estados Unidos su gran despegue, después de años de penurias legales para reivindicar su transparencia y su independencia frente a los sistemas piramidales, perseguidos sin tregua por una ley vigilante y sin contemplaciones. Y sobre todo por la presión de la industria tradicional, que veía peligrar sus privilegios. Los 90 supusieron el despegue de una nueva fórmula empresarial en la que pocos creyeron y a la que muchos se fueron sumando. El Muntinivel reunía todos los elementos de sueño americano. Cualquiera podía llegar a lo más alto del éxito con el único requisito del trabajo y la perseverancia. 

Pero será la llegada de este siglo el que marcará el inicio del nuevo Network marketing. La fórmula americana se universaliza y se extiende como la pólvora, primero a los países vecinos de Latinoamérica, a Japón, y a continuación a Europa. Gran Bretaña y Alemania no tardaran en darse cuenta del potencial que ofrece esta nueva fórmula de hacer negocios y comienzan a proliferar los networkers. Ya no es un calificativo extraño y desconocido para la mayoría, que en ocasiones se identifica con un reclutador piramidal. Comienza a ser un trabajo cada vez más demandado y prestigioso. Un empresario independiente que desarrolla su actividad sin limitaciones, sin normas jerárquicas y sin dependencia de un organigrama.